1. Portal de empleo generalista: un lugar web orientado al empleo y que presta servicio tanto a los ofertantes de empleo (empresas) como a los demandantes de empleo (candidatos).
2. Portal de empleo propio: un lugar web igualmente orientado al empleo pero gestionado directa y exclusivamente por una empresa con el fin de publicar sus propias ofertas de manera que las personas interesadas puedan inscribirse.
Los portales de empleo generalistas han ido sustituyendo paulatinamente y llevado casi a la extinción la costosa (por precio) y clásica (hasta hace pocos años) publicación de ofertas en prensa escrita. Pero es probable que también los portales de empleo generalistas estén viviendo sus últimos días de gloria, al menos tal y como los conocemos.
En la era 2.0 o del “social media” ya no sobrevivirán los portales de empleo generalista enfocados de forma unidireccional desde las empresas contratantes hacia los demandantes de empleo. La comunicación entre empresa ofertante y candidato demandante suele ser muy escasa y unidireccional. Es la empresa la que emite las comunicaciones, cambia los estados y cierra las ofertas. Los demandantes sólo pueden esperar a ser contactados y, en el mejor de los casos, ser informados de que la empresa ha estado consultando su currículum.
Hoy en día precisamos de portales generalistas más “sociales” y “amigables” que permitan la interacción y comunicación continua entre la empresa y los demandantes de empleo. Estos portales deben ser capaces de transmitir nuestra marca de empleador (“Employer Branding”) y sintonizar con los aspirantes a trabajar en la compañía, teniendo como último objetivo el logro del compromiso (“Engagement”) de estos últimos y de los empleados, con nuestra marca (“Brand”).
Son notorias ya ciertas aproximaciones de portales generalistas de empleo hacia el 2.0 (“Social Media”). Éstas aproximaciones consisten fundamentalmente en:
Conseguir esto último, tratándose de un portal de empleo generalista, y por tanto, con un intermediario en juego, es difícil. Aún así, éstos portales han conseguido aumentar la comunicación bidireccional entre los aspirantes por un lado, y las empresas por otro. Es decir, se han vuelto más sociales o 2.0.
Con respecto a las aproximaciones hacia los candidatos (aspirantes) suelen proporcionar contenido sobre los siguientes temas, entre otros:
Y por lo que respecta a las aproximaciones hacia las empresas:
¿Qué ocurría si quitamos de en medio el factor intermediario? Es decir, pasamos de un “portal de empleo generalista” a un “portal de empleo propio”. Las ventajas desde el punto de vista de estrategia 2.0 son evidentes:
Con la llegada de los softwares de reclutamiento, todas estas metas se pueden conseguir des de un solo sitio.
En definitiva, se trata de pasar de un “corcho de ofertas ordenado” gestionado por un tercero a un lugar dónde empresa y candidatos interactúan sin intermediarios. Así las cosas, quisiera que te preguntaras lo siguiente:
¿Estás de acuerdo con la afirmación acerca de que los portales de empleo se están quedando obsoletos? ¿Hacia dónde han de tender los portales de empleo?
Espero vuestros comentarios. Hasta pronto.
Escrito por Antonio Blay Pérez, Responsable Corporativo de Reclutamiento y Desarrollo de Grupo Hospitalario Quirón, S.A.