Continuando con a mi pasado post sobre el valor de la Huella Digital para evaluar el Talento, hoy quiero hablar de los contactos o conexiones como fuente de Talento.
Fue el filósofo británico Frances Bacon quien mencionó que “El conocimiento es poder”, o sea, si mantenemos en secreto aquello que sabemos, tendremos una ventaja competitiva.
Está claro que el conocimiento y la experiencia es una parte clave del talento pero ¿Son suficientes?
Vivimos en una era donde la explosión de información y velocidad de cambio nos hace muy difícil mantener el ritmo, y más aún, si seguimos utilizando los modelos y herramientas tradicionales. En los últimos 4 años se han generado más datos que en toda la historia del mundo y cada persona tiene acceso a más de 34 billones de bits de información al día, lo que equivale ¡a más de 2 libros!
Nos enfrentamos cada día a un exceso de información que se genera a gran velocidad y esta aceleración hace que todo lo que aprendamos se quede obsoleto rápidamente:
- El 50% del conocimiento o de lo que aprenden los estudiantes de carreras técnicas está obsoleto a los 3 años
- Los 10 trabajos más demandados hoy no existían hace 10 años
¿Qué es más importante cuando buscamos Talento para nuestra empresa o nuestro proyecto, el know-how de la persona o el know-who?
Tengo una anécdota curiosa sobre este punto. En mi última etapa en HP hicimos dos adquisiciones de empresas israelitas con lo que íbamos habitualmente a Israel. En uno de sus primeros viajes mi colega Pau Molinas se encontró con la sorpresa de que el taxista no reconocía el nombre de la empresa HP-Indigo.
Mientras buscaba la dirección, el taxista le preguntó quién era el jefe y Pau le respondió muy sorprendido “Alon BarShany”. El taxista, sin aminorar la velocidad, empezó a hacer múltiples llamadas y al cabo de menos de dos minutos, se volvió y le dijo “¡20 Einstein street , Ness Tsiyona!”. Y entonces, ya más relajado, le empezó a relatar las hazañas de Alon, al que no conoce: sus trabajos anteriores, detalles de su familia y de su procedencia, el regimiento de su servicio militar,… para rematar le dijo que alguno de los hijos de la familia Bar-Shany va al mismo colegio que su hija.
¿Increíble, no? Como dice Yossi Vardi, “El mapa social en Israel es muy sencillo: todo el mundo conoce a todo el mundo.”
Israel es el único país del mundo que recluta tanto a hombres como mujeres para sus fuerzas armadas. Pocos años después de finalizar su servicio militar, todo joven israelí dispone de un amplio círculo de conocidos a lo largo del país y en todas las capas sociales, profesiones y ocupaciones imaginables lo que representa un activo de valor incalculable para la vida profesional.
Todo esto está muy alineado con el estudio de Granovetter, sociólogo de la Universidad de Standford titulado “The Strenght of Weak Ties” o Fortaleza de las conexiones débiles. En este estudio de los años 60-70 sobre la gente que buscaba empleo, descubrió que un 80% lo encontró gracias a los amigos de los amigos.
Su teoría es que el valor viene precisamente de esas conexiones débiles y que las personas con éxito serán aquellas que no están absolutamente cerradas y que por tanto comparten ideas y conocimiento con esas conexiones débiles.
Con todo ello concluyo en que un elemento clave en el reclutamiento y en la búsqueda de Talento debería ser la calidad de la red (network) y la capacidad de networking que tiene las personas para poder buscar con facilidad y conseguir aquello que no tienen o no saben.
Termino con una frase de Levy adaptada por Dr Teigland: "Nadie sabe todo, todos sabemos algo, y el conocimiento al final reside en nuestras redes".