Tú quieres, de verdad que quieres, lo intentas, pero hay veces que no das para más. Ya sea porque tu tiempo no es infinito, debido a que afortunadamente tu empresa ha crecido tanto que es imposible que tú te ocupes del reclutamiento en persona; o, sencillamente, que piensas que si esta labor la lleva a cabo una empresas especializada, los resultados serán mejores. Lo cierto es que en ocasiones el reclutamiento se acaba por externalizar. No es una tragedia; puede ser muy positivo para ti. Eso sí, tienes que tener en cuenta varios aspectos antes de lanzarte a la externalización.
Lo que tienes que hacer es ver esta alternativa siempre como una inversión, y nunca como un gasto. En otras palabras, inviertes presupuesto en pagar a una empresa externa pero aspiras a aumentar tus beneficios. Y ojo, estos pueden venir tanto en resultados como en tiempo ahorrado en esta gestión que puedes dedicar a otras cosas. Pero siempre tienes que tener esta filosofía en la cabeza.
La idea es que todos los factores a tener en cuenta en un proceso de reclutamiento sean asumidos por la empresa externa. Aspectos que, como hemos visto en otras ocasiones, son muchos y de muy variada índole. Pueden ir desde la publicación de ofertas, hasta el cuidado de nuestra imagen de marca en redes sociales. Es decir, una enorme inversión en tiempo que la empresa, en principio, se ahorraría.
La utilización de especialistas para dichos procesos no puede sino generar una sinergia positiva por cuanto conocen a la perfección las técnicas de reclutamiento y presumiblemente podrán alcanzar los objetivos más ventajosos para ambas partes. Por otro lado, la empresa contratada es una magnifica fuente de consulta para todos los aspectos relacionados con el reclutamiento, por lo que podrá resolver muchas de tus dudas al respecto, ayudándote a tomar buenas decisiones con respecto a lo candidatos.
No obstante, hay otros aspectos que debes tener en cuenta a la hora de externalizar el reclutamiento. Aspectos que tienen mucho que ver con que seas partícipe de las decisiones a tomar no solamente en sus elementos finales, sino durante todo el proceso. Que compartan las notas de entrevista contigo, que puedas ser invitado como colaborador para seguir el procedimiento o que en todo momento te mantengan informado de su evolución no es solamente un derecho que tienes, sino que seguramente se convertirá en la mejor forma de optimizar tu inversión.
Sumar tu propio punto de vista con otros profesionales desembocará en la obtención de los mejores resultados. En el otro extremo de la balanza existe la posibilidad de desequilibrar los procesos dentro de tu propia empresa hasta puntos bastante serios si decides recuperar tareas antes externalizadas. Esto es algo que debes evaluar con detenimiento antes de tomar una decisión.
Externalizar el reclutamiento en una empresa no tiene que ser, ni mucho menos, algo similar a perder todo el poder sobre el mismo, sino que supondría una inversión en tiempo y resultados cuyos beneficios tendrías que ver a medio plazo. En pocas palabras, no es algo ante lo que debas asustarte, pero sí que tienes que hacer un seguimiento de cerca.
Y tú, ¿has externalizado tu proceso de reclutamiento? O, ¿estás pensando en hacerlo? Cuéntanoslo más abajo :-)
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