Blog de Inbound Recruiting

La vida es una constante negociación, ¡y lo sabes! No sólo en el ámbito laboral, también en la esfera de lo personal te pasas el día negociando. Una negociación en sentido estricto es "el proceso por el cual las partes interesadas resuelven conflictos, acuerdan líneas de conducta, buscan ventajas individuales o colectivas, procuran obtener resultados que sirvan a sus intereses mutuos." En ocasiones puedes tener conflictos internos donde tanto tu parte racional como tu parte emocial han de salir ganando para que tú alcances un equilibrio. Es decir, que ambas partes ganen: Win-Win. ¿Por qué cuándo estás desempeñando tu faceta como reclutador no haces lo mismo?

Tú quieres, de verdad que quieres, lo intentas, pero hay veces que no das para más. Ya sea porque tu tiempo no es infinito, debido a que afortunadamente tu empresa ha crecido tanto que es imposible que tú te ocupes del reclutamiento en persona; o, sencillamente, que piensas que si esta labor la lleva a cabo una empresas especializada, los resultados serán mejores. Lo cierto es que en ocasiones el reclutamiento se acaba por externalizar. No es una tragedia; puede ser muy positivo para ti. Eso sí, tienes que tener en cuenta varios aspectos antes de lanzarte a la externalización.

Si has decidido ampliar tu estrategia de reclutamiento en redes sociales y comenzar a atraer talento en Twitter, ¡estás de suerte! Reclutar en Twitter te ayudará a dar mayor difusión de tus ofertas de empleo, buscar candidatos a través de hashtags y mejorar tu employer branding. Pero para ello, has de saber por dónde empezar. Hay datos acerca del número de caracteres que funcionan mejor en un tweet o qué hashtags que has de incluir si publicas una oferta de empleo en Twitter. Si, por el contrario, quieres utilizar Twitter para hacer búsquedas de candidatos, también te será de utilidad saber el nivel de segmentación al que puedes llegar o lo beneficiosas que pueden llegar a ser las listas para clasificar el contenido que llega a tu TimeLine.

Existen muchísimos lugares donde está el talento y tú como reclutador sabes que no es tan fácil acceder a ellos. En anteriores posts, hemos visto que el talento es escurridizo y que sólo con tesón y estrategia puedes llegar a acceder a él. Hasta el momento lo que sabemos sobre el talento es que puede estar en cualquier lugar; que puede estar escondido en cualquier red social, que lo único que tú como reclutador puedes hacer es intentar atraerlo. Propiamente, el talento se define como: “especial capacidad intelectual o aptitud que una persona tiene para aprender las cosas con facilidad o para desarrollar con mucha habilidad una actividad.”

Lejos han quedado aquellos tiempos en los que los malos reclutamientos se escondían detrás de la falta de respaldo económico para llevarlos a cabo. No tener presupuesto para reclutar era utilizado como excusa para una mala estrategia que arrojaba nefastos resultados. Hoy en día esto está completamente superado, y es posible hacer un reclutamiento de calidad con muy poco presupuesto. Y, como casi siempre, la Red es en este caso nuestra aliada.

Hasta la fecha te hemos dicho una y otra vez que para ti como reclutador el análisis es fundamental; antes, durante y, por supuesto, después del proceso de reclutamiento. Y, precisamente, sobre eso versará el post de hoy, en él te hablaré de la importancia de extraer datos de procesos de selección ya concluidos para así poder recurrir a ellos en futuras ocasiones. Las empresas son entes vivos —no cabe duda— gracias al latido incesante de los que las capitanean, sostienen y conducen con atino —o sin él— a través de las bravas aguas del mundo empresarial.