Blog de Inbound Recruiting

Seguramente a muchos profesionales de los RRHH les sigue pareciendo que cada vez que su empresa necesita realizar un proceso de selección, puede convertirse en algo eterno. Pero ¿y si echamos la vista atrás unos 10 años? Entonces nos daremos cuenta de cómo han cambiado las cosas en el sector. Actualmente nos encontramos inmersos en la evolución de las nuevas tecnologías y su desarrollo en permanente cambio. “Adaptarse o desaparecer”; este es lema que predomina en los mercados, y por supuesto incluye también a nuestro sector, pues con la introducción de las nuevas tecnologías, redes sociales, Software de reclutamiento y demás herramientas digitales, hemos conseguido optimizar los tiempos de reclutamiento.

Una de las principales ventajas de las herramientas de reclutamiento 2.0, como puede ser un Software de reclutamiento, es que nos permiten publicar una gran multitud de ofertas en distintos lugares y de forma simultánea ahorrandonos mucho tiempo durante todo el proceso. Además de los tradicionales portales de empleo, los cuales han dejado de ser el principal sitio en el que publicar ofertas, también podemos utilizar las redes sociales, nuestra propia página de empleo, agregadores, etc. Sin embargo, ¿significa eso que tengamos que publicar nuestras ofertas en todos estos lugares?

Encontrar y captar a los mejores talentos para tu empresa no es tarea fácil. Afortunadamente, existen software informáticos que nos ayudan a automatizar y facilitar el proceso. Sin embargo ¿Cómo escoger un buen software de reclutamiento? El rápido avance de las nuevas tecnologías, así como la evolución de las formas de comunicación, han hecho que las técnicas de reclutamiento que se usaban hasta ahora, se hayan quedado obsoletas. Las empresas necesitan ahorrar tiempo y dinero sin perder la oportunidad de poder contar en sus filas con los mejores talentos de su sector. Modernizarse es la clave. Lo primero que debemos tener en consideración es que no todos los software de reclutamiento son iguales. No poseen las mismas características ni las mismas funciones, por lo que hay que seguir unos pasos para escoger el que mejor se adapte a nuestras necesidades.

La evolución en el uso y la interacción en la red ha supuesto pasar de la web 1.0 a la web 2.0 hasta llegar a lo que hoy conocemos como web 3.0. Poco a poco los cambios se han ido dando sin que casi nos percatáramos de ellos, pero sin duda, han conseguido que nos fueramos adaptando poco a poco a ellos.

El reclutamiento evoluciona y las personas que se encargan de ello, los reclutadores, es decir, tú, han de adaptarse al mismo ritmo para atraer a los mejores candidatos para cada posición. Igual estás confundido, igual creías que ya hacías bastante cambiando el papel por Excel pero no, no es suficiente. ¿Qué has de hacer ahora? Seguir evolucionando hacia un reclutamiento más efectivo, donde los procesos sean mas cortos y las posibilidades de dar con el candidato correcto sean mayores sin más esfuerzo. Un reclutador 2.0 también trata siempre de potenciar su personal branding e intenta que el candidato siempre gane algo.

La página web sigue siendo en la actualidad el elemento más importante para proporcionar visibilidad a tu empresa. Y lo sigue siendo aunque no te des cuenta de ello, aunque te de la impresión de que supone algo del pasado, algo que ha quedado apartado frente a otras nuevas vías de comunicación como las redes sociales. Precisamente ese es uno de los puntos fuertes de las páginas web: su cotidianeidad. Y es que hoy en día ya todos las hemos asumido como algo lógico, algo normal, que está por completo dentro de nuestra vida. En otras palabras, una web es algo que forma parte de la rutina de las personas, de los candidatos y, más concretamente, del talento, y que, por lo tanto, supone una enorme fuente de posibilidades para el experto en reclutamiento.